¿Hasta dónde?
Por: Pastor Rolando Rodríguez
El libro de los Hechos es un libro particular en el Nuevo Testamento. Es la continuación del libro de Lucas y se concentra en la obra de la Iglesia en sus comienzos. Este libro no dice que, después de la ascensión de Jesús, los discípulos alcanzaran grandes puestos de trabajo, levantaran empresas pesqueras, tuvieran mucho dinero, compran casas, ni que tuvieran tantos hijos. Hechos se concentra en todo lo que hicieron para Dios.
¿Qué se dirá de nosotros cuando ya no estemos? ¿Qué dirá Dios de nosotros? ¿Queremos vivir una vida sobre natural? Recordemos que el libro de Hechos se sigue escribiendo.
Filipenses 3:14 (NTV). Entonces, ¿Hasta dónde debemos seguir? Hasta la meta, hasta el final.
Dios nos escogió para que lleváramos fruto para Él y hay tres cosas, aparte de orar y estudiar la Palabra, que nos ayudarán a llevar mucho fruto:
1. Flexibilidad. Se define como la disposición para ser movido. ¿Qué pasa cuando algo es demasiado rígido, inflexible? Se rompe.
Romanos 8:14 (NTV). Si queremos que Dios se mueva en nuestra vida, debemos ser flexibles a que Dios nos cambie. Pero, a veces, queremos la bendición sin compromiso, queremos que Dios muestre su gloria sin pagar el precio para alcanzarla.
Mateo 16:25-26 (NTV). ¿Qué hay en esta vida que valga más que Dios y su voluntad?
Nuestra vida no es nuestra, le pertenece a Dios. 1 Corintios 6:10.
2. Sed y hambre. Salmo 63:1-2. ¿Por qué no tenemos sed, ni anhelo por Dios? Porque estamos llenos de otras cosas. Dios quiere que le conozcamos, que seamos su reflejo, que seamos portadores de su presencia, que no estemos solos. No hay nada más triste que un recipiente vacío y eso somos sin Dios.
Juan 4:42 (NTV). Que no nos cuenten lo que Dios puede hacer, vivámoslo de primera mano. Que tengamos una insatisfacción divina por lo que este mundo ofrece. No nos conformemos, aún hay mucho más de parte de Dios.
3. Disponibilidad. Lucas 17:26-27 (NTV). ¿Cómo fueron los días de Noe? Genesis 6 nos relata que la gente estaba ocupada amando más este mundo, el placer, lo temporal.
La gente no quería escuchar de Dios, tal vez pensando que todavía había tiempo.
Proverbios 16:1. Llegará el día donde todos tengamos que dar cuenta a Dios por lo que hicimos y por lo que no, en ese día las intenciones no contarán.
Mateo 25. ¿Con quién nos identificamos?
Mateo 6:33.
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